Ahora, las organizaciones en la actualidad se enfrentan a muchos niveles de competencia, como consecuencia de la globalización y del desarrollo tecnológico, entre otros factores, que las obligan a buscar ventajas diferenciadoras que sean sustentables a lo largo del tiempo.
Es así como las empresas han tomado conciencia de que su fuerza laboral, representa su única ventaja competitiva realmente estable. Los enfoques más empleados para retener el talento, es desarrollar nuevas habilidades, mejorar habilidades existentes, ofrecer mejores prestaciones y/o mejorar sueldos de contratación. Sin embargo, se han ido descubriendo otros elementos que se toman en cuenta a la hora de asumir un puesto o aceptar un cargo, y es el cómo se vive el día a día dentro de una compañía. Todos estos aspectos forman parte de la propuesta de valor al colaborador, que son evaluados por ellos mismos cuando deciden permanecer o cambiar de trabajo.
Por lo tanto, al considerar a empleadores y trabajadores dentro del escenario, se da apertura a una nueva perspectiva del marketing denominado endomarketing o insideout.
Las marcas deben transformarse si quieren realmente sobrevivir a esta nueva era del marketing. Un claro ejemplo es Birth Group, una agencia de publicidad especializada en insideout branding en CDMX y Puebla, que a través de su branding de valores, nos sigue conquistando y enamorando a cualquiera que escuche sobre su propuesta de valor.
A grandes rasgos, el branding es el proceso y gestión de la construcción y vida de una marca, pero esto va más allá que solo ser un proceso. A su vez, este pretende mejorar la percepción, reputación y el posicionamiento de una marca y claro, de su valor.
Déjame te cuento un poquito el porqué es verdaderamente importante ser una marca insideout y la rentabilidad de serlo.
Antes, el branding era una idea de comunicación y posicionamiento. ¿Qué pasa si ahora lo consideramos como una idea de comportamiento y actitud?
Ahora el branding es considerado como un recurso de comportamiento, mucho más allá de las ventas y de lo externo que toda la empresa debería de adoptar, puesto que, ya no son suficientes acciones puntuales, sino más bien, de una filosofía de marca. El branding ahora representa un elemento que aumenta la propuesta de valor y posicionamiento de una marca a través de la cultura, las relaciones dentro de la organización, los procedimientos, las prácticas etc., por eso es tan importante.
Todos somos branding dentro de una compañía, de lo contrario, cada área y cada departamento es una empresa diferente. El branding en pocas palabras ahora es lo que se vive.
Brand driven culture or culture driven brand
Ambos son conceptos que pueden expresar el ADN de una empresa. Pero, a través de la cultura de marca, se infunde el alma de esta. Con una buena cultura de marca, es fácil para las empresas resaltar un propósito específico y utilizar esa visión como guía para las operaciones diarias. En lugar de que la marca sea una imagen pública proyectada hacia el exterior a través del marketing sólo para los clientes, se convierte en algo construido y transmitido de adentro hacia fuera.
Una empresa capaz de fomentar una cultura de marca sana puede alcanzar los objetivos de negocio de forma estructurada y estratégica. Los empleados están impulsados y motivados por pasiones compartidas y los consumidores desarrollan sentimientos basados en la afinidad con la cultura que ven representada en las actividades diarias de la empresa. Eso es el insideout, la construcción de una marca paralela y consistente, tanto adentro como hacia fuera de una organización, es mucho más que su imagen, sus mensajes y valores asociados.
Recordemos que hacer un buen insideout ya no solo es tener una ventana filosófica bonita o un corazón ideológico colgado en la pared, se trata de mostrar fuerza y autoridad en la vulnerabilidad, es decir, la parte humana de las marcas y de quien las conforma.
Es por eso, que podemos ver al branding desde este punto de vista estratégico, ya que este término cada vez determina más el poder competitivo de una empresa, es por ello que todo lo que vaya en contra sentido a ese branding, es matar un poco (o mucho) la marca o la empresa. Una cultura basada en el branding o viceversa, con grandes esfuerzos internos para permearlo, para vivirlo, para generar dueñes, es una forma de vivir en lo que la marca cree.
Una marca íntegra es una marca con propósitos sólidos y congruentes, que viven día a día con sus colaboradores y que influyen en sus clientes, convirtiéndose en un legado. ¿Te gustaría eso para tu marca?, ¿tú qué opinas sobre el insideout?
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